5 Hábitos que protegen tu corazón
1. Modera tu consumo de alcohol.
Recuerda que beber en grandes cantidades puede incrementar el riesgo de presión alta, que es uno de los factores más influyentes a la hora de sufrir un infarto. La bebida en exceso debilita el músculo del corazón, haciendo que no bombee la sangre de forma eficiente. Esta condición se llama cardiomiopatía y es potencialmente letal.
2. Haz ejercicio por lo menos dos horas y media a la semana.
Actividades como caminar, montar en bicicleta y hacer yoga, tienen un efecto positivo en tu organismo: reduce la presión arterial y los niveles de grasa en tu sangre, aliviando la carga de tu corazón.
3.Sigue una dieta saludable.
Incluye en tus alimentos diarios frutas, verduras, granos, productos lácteos y proteínas como los fríjoles. El plan recomendado si eres una persona sedentaria es de 1.800 calorías; pero si eres activa es aconsejable comer alrededor de 2.200 calorías al día. Consulta con tu médico para determinar cuál es el plan que mejor se ajusta a tu organismo.
4. ¡Dile no al cigarrillo!
Fumar daña el revestimiento de tus arterias, llevando a la acumulación de placas grasosas que se incrusta en la capas interiores y estrecha las arterias, dificultando tu circulación sanguínea, causando dolor en el pecho (llamado angina) y aumentando el riesgo de que sufras un ataque cardiaco.
Si ya eres fumador y sientes que no puedes dejar el hábito, consulta con tu médico ¡él puede ayudarte!
5. Consulta tu médico periódicamente.
Si sientes dolor de pecho, congestión, o que tu corazón está latiendo a un acelerado o irregular (arritmia), te recomendamos visitar a tu médico. Puedes tener Fibrilación Auricular, una enfermedad que altera tu ritmo cardiaco normal y aumenta el riesgo de que sufras un ACV, es decir, un accidente cerebrovascular o derrame cerebral. Recuerda que la Fibrilación Auricular no presenta síntomas en muchas personas, ¡así que un chequeo preventivo no está de más!
Reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares también depende de ti. Conoce los factores de riesgo de la fibrilación auricular en nuestra sección ¿Qué es?