Aunque un aneurisma aórtico abdominal puede ser fatal si se rompe, la buena noticia es que un tratamiento eficaz puede prevenir que eso suceda.
Si entiendes los factores de riesgo, los síntomas y las opciones de tratamiento, puedes estar preparado para tomar medidas rápidamente.
La aorta es el vaso sanguíneo principal del cuerpo que extiende desde el corazón, a través del tórax y por el abdomen y lleva la sangre desde el corazón al resto del cuerpo.
La aorta abdominal es la parte de la aorta situada en el abdomen (Ver Figura 1).
Un aneurisma es el abultamiento o hinchazón de una zona debilitada de un vaso sanguíneo. La pared de la aorta se puede debilitar con la edad, o debido a una enfermedad o traumatismo.
Esto puede hacer que en la pared de la aorta se forme un bulto, dando lugar a un AAA (Aneurisma de Aorta Abdominal) (ver Figura 2).
A medida que el bulto crece, la pared de la aorta se debilita. Esto pude causar que la aorta se rompa y cause un sangrado interno masivo. La rotura de aneurisma puede provocar la muerte y necesita inmediata atención médica.
La mayoría de las personas con un aneurisma aórtico abdominal no presenta ningún síntoma. A menudo, los aneurismas crecen lentamente y pasan desapercibidos, algunos nunca llegan al punto de explotar; otros se agrandan
Si los síntomas están presentes, pueden incluir:
Cuando un aneurisma abdominal se expande, es posible que tú o tu médico noten un dolor punzante en la parte media o inferior del estómago, un dolor en la parte inferior de la espalda, o sensibilidad en el tórax.
La mayoría de los aneurismas se identifican durante exámenes médicos de rutina, como Tomografía Computada o ultrasonido.
Aunque las causas exactas del aneurisma aórtico abdominal no estén claras, existen algunos factores de riesgo asociados con el aneurisma aórtico abdominal:
Si tu médico observa signos de un aneurisma aórtico abdominal, solicitará análisis especiales para confirmar el diagnóstico. Generalmente, esto implicará la adquisición de imágenes del abdomen mediante resonancia magnética (IRM), tomografía computarizada (TC) y ecografía.
Las imágenes producidas mediante estos métodos ayudan a tu médico a "ver" el interior de la aorta, así como de otros vasos sanguíneos y órganos en el cuerpo, para determinar la presencia de un aneurisma aórtico.
Si tiene bradicardia, puede ser candidato a un dispositivo cardíaco implantable denominado marcapasos.
El objetivo al tratar un aneurisma aórtico abdominal consiste en evitar que este explote o se rompa.
De acuerdo con el tamaño y el estado del aneurisma, puede llevarse a cabo mediante la observación atenta o la reparación del aneurisma.
No todos los aneurismas aórticos abdominales necesitan cirugía. Si el aneurisma es pequeño, es posible que el médico decida esperar y observarte con cuidado para establecer si se producen cambios.
Si tienes presión arterial alta, es posible que el médico recete medicamentos para reducirla. Si fumas, es posible que tu médico te sugiera que busques ayuda para dejar de hacerlo. Tu médico también puede pedirte que hagas cambios en tu dieta o en tus hábitos de ejercicio.
Si al médico le parece que existe un riesgo de que el aneurisma aórtico se reviente, puede que te recomiende uno de los dos métodos de reparación de aneurismas: una reparación con cirugía abierta o una endoprótesis vascular.
Con la reparación con cirugía abierta, el cirujano realiza un corte de gran tamaño, o incisión, en el abdomen donde se encuentra el aneurisma. Posteriormente, el área dañada por el aneurisma se separa quirúrgicamente de la parte principal de la aorta y se lo reemplaza por un tubo sintético (conocido como injerto aórtico), que se fija con una sutura.
La reparación con cirugía abierta de un aneurisma aórtico abdominal se realiza con anestesia general y demora entre 3 y 4 horas. Puedes prever pasar 1 día en una unidad de cuidados intensivos y permanecer en el hospital durante 7 a 10 días.
Una alternativa menos invasiva de la reparación con cirugía abierta es la reparación de aneurisma endovascular (EVAR) utilizando un dispositivo especial llamado endoprótesis endovascular. La endoprótesis se coloca dentro del área dañada de la aorta para excluir el aneurisma del flujo sanguíneo normal. Está diseñada para fijarse sin abrir la aorta quirúrgicamente.
Debido a que la reparación del aneurisma endovascular es menos invasiva que la cirugía abierta, puedes prever que la estadía en el hospital será más breve, habitualmente de entre 2 y 4 días.
Hay una serie de beneficios al someterse a un procedimiento de endoprótesis abdominal. Algunos de ellos se detallan a continuación:
Mantenga una estrecha comunicación con el médico para controlar la enfermedad y comprobar si los tratamientos están funcionando correctamente o si tiene nuevos síntomas o efectos secundarios.
En caso de emergencia, busque ayuda. Póngase inmediatamente en contacto con el médico si el ritmo cardíaco es más lento de lo habitual, si siente que se va a desmayar o si nota que le falta el aire.